martes, 24 de diciembre de 2013

Crónica TIMBER TIMBRE en Charada, Madrid 17 de diciembre de 2013 por Victoria


TIMBER TIMBRE en Charada, Madrid 17 de diciembre de 2013

Tercera vez que el trío de Toronto visita Madrid, pero la primera que lo hacen como cabeza de cartel. Los que los habíamos visto en El Sol como teloneros de Akron Family o acompañando a Micah P. Hinson en Joy Eslava nos quedamos con ganas de más, y por fin el pasado martes 17 nuestros deseos se hicieron realidad. El tour europeo de Timber Timbre tenía dos únicas fechas en España, reservadas para Madrid y Sevilla.
Sólo la semana anterior la banda había anunciado a través de su página web el lanzamiento de su quinto álbum de estudio, que verá la luz el 1 de abril de 2014 y que llevará por título ‘Hot Dreams’.
Así que a la buena noticia de verlos por fin como cabeza de cartel, se añadía ahora el aliciente de oír en primicia y de primera mano algunos de los temas que compondrán su nuevo disco. La cosa no podía pintar mejor. Día grande en Madrid, con una Charada con el cartel de ‘Aforo Completo’.
Abriendo para Timber Timbre, otra canadiense pero ella de Montreal. Erin Lang es la
cantante detrás del nombre de Feral & Stray, con dos discos álbumes ya publicados, aunque cantó sobre todo del segundo de ellos, ‘Between You And The Sea’ [2013].
Venía de talonear nada menos que a Agnes Obel, con cuyo estilo quizás tenga algo más en común que con Timber Timbre. Una voz dulce y suave, casi un susurro a veces, acompañada de su guitarra eléctrica. Me quedo con su tema ‘Quiet Soul’, que interpretó al omnichord, porque creo que la describe perfectamente. Sus canciones son tranquilas y minimalistas, para escuchar en el sofá acurrucada bajo el calor de una manta en un día de lluvia.
Con un poquillo de retraso Timber Timbre toman el escenario de Charada. Todo es penumbra, luz roja y sólo unos farolillos, también rojos, que penden de sendos cables sobre Taylor Kirk y Simon Trottier ayudan a iluminar el oscuro sonido de esta banda. Apenas se adivinan sus siluetas, e incluso Taylor comenta que es una lástima haber escogido esta iluminación porque la sala es estupenda cuando las luces están encendidas. No puedo menos que estar de acuerdo con él, y ése es el motivo de no poder unir fotos del concierto a la crónica: no soy capaz de sacar una sola foto decente del grupo.
Hoy vienen sin el violín de Mika Posen, lo que disminuye los tintes folk del grupo a favor del sonido rock.
Abren acordes al ritmo de los latidos del corazón, de un tema desconocido, que supongo irán incluidos en el ‘Hot Dreams’[2014].
Tras otro tema nuevo más, el tercero de la noche es ‘Magic Arrow’ y a continuación ‘Bad Ritual’, con un tono melancólico que sugiere los temores que habitan en la oscuridad de la noche.
Con ‘Too Old To Die Young’ consiguen que todos coreemos “I’m givin’ it, givin’it, givin’ it,givin’ it all up”, y Taylor nos deja cantar solos, se queda en silencio
escuchándonos. No puede evitar interrumpir un momento para sonreir y darnos las gracias por los coros.
A continuación la brillante “Until The Night Is Over’, favorita de una servidora, y que al escucharla de nuevo en directo se me pega en la piel, la oscuridad de la sala contribuye a que la música se convierta en una sensación al tacto más que al oído.
No se queda en la piel, va penetrando y llega a las venas. Cuando canta “I ain’t no doctor, babe. I ain’t no doctor’s son, but I’ll cool your fever until the doctor comes...I just wanna change your mind”, con una honestidad conmovedora, es difícil no sentir escalofríos. Es de una perfección turbadora.
La peculiar dicción de Taylor Kirk es hipnotizante, y terminó de hipnotizarnos con ‘Black Water’, haciendo balancear el farolillo hacia nosotros. Las teclas de Simon Trotier son como gotas de esa ‘black water’, con tintes tan oscuros como melancólicos cuando todos cantamos “all I need is some sunshine”.
Timber Timbre nos ha metido en el bolsillo de nuevo, y durante la hora y media nos regalaron numerosos adelantos de ‘Hot Dreams’. Taylor nos da las gracias por el buen recibimiento que le hemos dado a los nuevos temas. Bromea con que las hubieran tocado de todas formas, jeje. Es una primera impresión y por lo tanto tendré que escucharlo debidamente cuando salga en abril –¡estoy deseando, o sea que es buenísima señal! – pero creo que se decantan más hacia el sonido rock que hacia el folk, acentuando aún más si cabe la prodigiosa voz de Kirk. Hubo momentos en que no pude evitar recordar a Elvis.
Se suceden ‘Woman’, con su ritmo obsesivo de un hombre desesperado y al borde de la locura, ‘Lonesome Hunter’ de una belleza intemporal y fantasmagórica, y después ‘Creep On, Creepin On’. Todo es como la banda sonora de una película de terror, pero de terror psicológico.
Termina el concierto pero el grupo no deja el escenario, Taylor bromea con el tema de los bises, dice que podrían hacer el paripé y hacer como que descansan, toman un whisky y averiguan el significado de los signos jeroglíficos en las paredes de la sala, pero saben que queremos unos temas más, y ellos están deseando tocarlos. Además, odia hablar en el escenario, así que sin más dilación nos hacen otros dos adelantos del nuevo álbum, llamada ‘Black Wind’, y una prodigiosa balada llamada ‘Run’ que Kirk interpretó sólo con su guitarra. Palabras mayores. Que se aparte Elvis, que llega Taylor Kirk!
Cerraron un concierto redondo con ‘I Get Low’ y ‘Lay Down In The Tall Grass’ con un público completamente entregado y encantado.
Es de esperar que vuelvan por Madrid en primavera– dijeron que siempre es genial tocar aquí para presentarnos su quinto disco que estará para entonces ya en la calle.

No hay comentarios:

Publicar un comentario