El Festival Internacional de Cine del Sahara
(FiSahara) organizaba
en Madrid un concierto solidario para conmemorar sus 10 años, y recaudar fondos
para la causa Saharaui. Como maestros de ceremonias nos recibían los actores
Juan Diego Boto y el incombustible paladín de las injusticias Willy Toledo,
encargados de presentar a los artistas, y exponer la actual situación en la que
se encuentra el Sahara, concienciándonos del problema, que ciertamente está
ahí, enroscado desde hace años.
Con las
entradas agotadas prácticamente dos días después de salir a la venta, la
expectación era máxima; parte por el cartel (Vetusta Morla, Depedro, Coque
Malla…) parte porque a todos nos gusta ayudar, y dada la buena acogida del
público, se creó una Fila 0 para que la gente pudiese aportar su granito de
arena.
El
concierto lo abrió la dulce voz de Carmen Boza, con su guitarra, tres canciones
que nos supieron a poco. Minutos después, el escenario de la sala se quedaba
pequeño para recibir a los 7 chicos de La M.O.D.A (La Maravillosa Orquesta del
alcohol) que vinieron desde Burgos con su folk para animar la fiesta, porque
aquello amigos, se convirtió en una fiesta por todo lo alto. Tras este desgaste
de energía, salía a escena Amparo Sánchez, para dar un toque sereno y
permitirnos retomar el aliento. Para nuestra sorpresa no salía sola, le
acompañaba su amigo Jairo Zabala a la
guitarra. Preciosa la actuación de Amparo, me encanto! Especialmente cuando
dijo “tenemos que perseguir nuestros sueños” Que grande!
Depedro
brilló con luz propia. Acompañó a la guitarra a Amparo y juntos cantaron
“llorona” poniéndonos a todos ñoños, no contento con eso, nos deleitó con la
preciosa “Como el viento”, sin olvidarse por supuesto de “Un hombre bueno” para
terminar cantando “Diciembre” con Pucho de Vetusta Morla. Momentazo de la
noche.
La magia
de “Diciembre” y el magnetismo de Jairo y Pucho flotaban aun en el ambiente…
cuando apareció Coque Malla. No fue fácil actuar después de Depedro, que se
había salido previamente, pero aun no tengo claro si lo que hizo el madrileño
fue cantar, recitar o que… tuve la sensación de que había escogido las cuatro
canciones más lúgubres de su repertorio, y no fui la única.
Pasado el
trámite, llegaba la hora de los discursos. Esta vez Boto y Toledo le cedían la
palabra a María Carrión, directora ejecutiva del festival, José Taboada,
presidente de la Coordinadora Estatal de Asociaciones por el Sáhara y Jadiyetu Mojtar, presidenta de la Unión Nacional de
Mujeres Saharauis.
Vetusta
parecía no salir nunca y el calor en la sala se hacía insoportable, la gente aguantaba
estoicamente los discursos abanico en mano. Por fin, aparecieron en el
escenario Guille, Pucho y oh sorpresa… Jairo (otra vez). Otro precioso momento
de la noche. Se marcaron un tema que no había escuchado antes, pero os puedo
asegurar que sonó increíble. Cuando se juntan dos grandes, no se eclipsan, es
más una alineación de planetas que hace que sucedan cosas increíbles.
Finalmente,
tuvimos a los de Tres Cantos al completo en el escenario, había muchas ganas de
Vetusta. Salieron dándolo todo, como solo ellos saben hacer, “boca en la
tierra”, “lo que te hace grande”, “maldita dulzura”, “Valiente”, canciones
aderezadas con palabras de Pucho, que
recordaba aquella vez que estuvieron en los campamentos Saharauis. Por lo visto
Guillermo había desempolvado fotos de aquella aventura y se les notaba
emocionados recordando todo aquello. Incluso Pucho tuvo el detalle de cambiar
su adorada camisa de pajaritos y lucir una de Fisahara para despedir la noche,
como no podía ser de otro modo, cantando “Saharabbey Road”.
Sahara,
“Es hora de volver a empezar”
Un abrazo #SiempreUnAbrazo
Esther (@estherdibae)
Os dejo los enlaces del festival, así
como la Fila 0 para donativos: