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El oscense, Javier Almazán, regresa a la primera línea de fuego con su nuevo disco “Los Puentes Hundidos”. Un trabajo intenso y honesto que, tanto en letras como en música, supone un giro a zonas más oscuras, a caminos algo más sombríos, respecto a lo que nos tenía acostumbrados hasta ahora.
Un disco con vocación de álbum con una única presentación en doble formato: “LP de vinilo +CD” en una edición ultralimitada de 250 copias.
Concebido como un todo, “Los Puentes Hundidos”, es quizás su disco más sincero y arriesgado en el que los textos parecen ser esos puentes titulares que nos conducen de una canción a otra, de una confesión a otra, de un sonido a otro.
Desde la atmósfera opresiva de “El Miedo” hasta el inicio Krautrock de “Los Puentes hundidos”, pasando por la intensidad vespertina de “Fulminado”.
Un inspirado Almazán que, con unas letras escritas desde las vísceras y con la honestidad por bandera, nos habla del vértigo del tránsito a la edad adulta (“¿Crecer es matar a un niño?”), del final de un amor agotado (“Ella dice”), del final de la fiesta , y la llegada el cinismo y la mentira (“Los amigos de cuarto de baño se han evaporado… ¡Ve y localízalos!” dice en “Uno Vs. El mundo formal”) o de acordarnos de cómo fuimos cuando nos dicen cómo somos (“parece que estás hablando de otro” repite en “No me reconozco”).
Bofetadas de realidad y descreimiento (“el traje nuevo del emperador/ lo compruebo a última hora / sigue estando en vigor/No pasa de moda”. “La guerra por mi lado”) y que, en conjunto, son un retrato del duelo por el tiempo que se escurre entre los dedos. Pero, aún en esta atmósfera sombría, Javier todavía permite que se cuele algún rayo de sol como ocurre en el cambio final de la contundente “Tu cara cuando miras los aviones” con esas líneas definitivas “no dejes de mirar / no dejo de admirarte” o en “Los Puentes hundidos” en la que termina con “estoy convencido / se va a superar el duelo”. El equilibrio de las luces y las sombras de un autor a reivindicar.
“Los puentes hundidos” como idea contraria a “tender puentes”. El aislamiento en uno mismo, la búsqueda de un lugar que ocupar, el enfrentamiento y la aceptación o no aceptación del paso del tiempo, de la renuncia, de la frustración, de la necesidad de adaptarse para sobrevivir siendo razonablemente feliz.
8 Abril: Estreno del vídeo de “Los puentes hundidos”, la canción.
14 Abril: sale a la luz “Los puentes hundidos” álbum PL+CD
Próximos Conciertos:
15 Mayo. La Lata de Bombillas (Zaragoza)
22 Mayo. El Veintiuno (Huesca)
6 Junio. Taboo (Madrid)
